ALGO PARA PENSAR

Trabajar sin "mirar al dedo"ya lo recomendó el Apósto Pablo a la comunidad cristiana recien nacida,y esto lo hacia siguiendo la tradición hebrea,de los siervos que miraban a los dedos de sus señores en espera de la órden oportuna.
Tambien tocante a la palabra empeñada, nos recuerda el salmista:"el hombre habiendo jurado en daño suyo, no por eso muda".
Pero los tiempos cambian,los condiciones objetivas son nueva cada mañana y, el hombre que es el mismo,en lo tocante a sus habilidades de aqdaptación se conforma convenientemente en cada devenir situacional,para supervivir y mantener el estatus que en un momento dado ha alzanzado.
Es asi de complejo el hombre,que a decir de Baltasar Gracian,es sujeto de estudio individual más que social.
En su complejidad bio-Psico-somática,deja ver su habilidad para la "adaptación del medio"en una combinación a lo Darwin-Maquiavelo.El perfecto hipocrité de la era actual.
Malabarista tanto en lo social como en lo politico.
Y tan hábido de poder como siempre.
Todavia recuerdo,la frase aquella:"no lo lleves a la iglesia, que te perjudica"Si, me refiero a los que axiologicamente,prefieren ser cabeza de raton que cola de león, y estar con anuencia a los dictados del momento.Son la antítesis de Hombre Nuevo de Pablo de Tarso y Vasijas de barro que se deshacen en las manos del alfarero.
Esa burocracia empresarial que, divorciada de las realidades son freno al desarrollo armónico de la sociedad y trabaja a golpes de consignas y musica impelativa de a lo Warner, para poder ejecutar a tono de impulos externo a falta de conciensa interior que le impulsen en aras del sacrificio y del bien comun.
este hombre mediocre no se sana con el cambio de las condiciones ni de tiempos ya que son estatuas de sal anquilosados en su propia complacencia.
La burocaqracia tiene en si el gérmen de la destrución de todo lo que tocan, son los unicos que pueden destruir cualquier revolucónn como elefantes en una casa de cristal.

Rev Leonides Penton Amador