HECTOR MUÑOZ
Funcionario público o Servidor Social.
Este día, los funcionarios públicos cumplen una fecha más de aniversario. Sus valiosas funciones como vanguardia en la administración del estado y ejecutores de los proyectos de las políticas públicas, forman parte fundamental para el movimiento y desarrollo de la sociedad.
En este mismo sentido ya es hora que el funcionario público del siglo XXI, vaya acorde a la realidad del país. Es decir, le corresponde ir a la par del proceso revolucionario, por tal motivo debemos cambiar y romper paradigmas existentes en la administración publica. Es por ello que el gobierno debe comenzar con la reorganización del estado.
Una manera precisa de cambiar este problema es jubilando a todo aquel funcionario que se oponga al cambio de mentalidad burocrática por una voluntad productiva, y con esto quiero aclarar que no se trata de excluir a todas aquellas personas que sean adultos contemporáneos que poseen las instituciones, si no, que se trata de revolucionar las mentes humanas.
Ya el funcionario tiene que entender que este no puede actuar de forma aislada, encerrado en su pequeña oficina o cubículo detrás de un escritorio y detestando al pueblo, este debe entender que se debe a la sociedad, en forma conjunta e integral con ella misma.
En nuestro proceso revolucionario debe predominar la ideología de la clase proletaria, ese es su mayor reto. Se debe trabajar en la creación de la conciencia social para poder obtener la hegemonía de los medios de producción. Y es aquí donde se tiene el mayor de los desafíos, por lo tanto es indispensable una revolución cultural para poder cambiar de la cultura rentista y parasitaria, a una cultura soberana y productiva.
La clave esta en la creación de trabajo voluntario, donde los funcionarios dispongan de unas horas destinadas al contacto con las diferentes comunidades para crear ese vinculo irrompible de la sensibilidad humana y amor al prójimo.
Nuestra sociedad, poco a poco va cambiando de forma integral y el sector público no esta exento de ello, el reto es cuesta arriba. Nuestras instituciones deben dar un vuelco de 180 grados, los funcionarios deben aportar su grano de arena en este sentido. La patria grita vehementemente por ese cambio de estructura donde debe mandar el pueblo, por lo tanto no podemos tener funcionarios que bloqueen y sean células de resistencia. Por el contrario debemos tener servidores sociales de cara al proceso de transformación a la sociedad mas justa que contenga paz con justicia social.
Hago un llamado humilde a la reflexión de todos aquellos funcionarios públicos a no ser parte de la resistencia al cambio, por el contrario llamo a que metan el pecho por la patria, porque de lo contrario la historia no nos perdonara. Recuerden, cada día que pasa estamos escribiendo sus paginas con nuestro accionar. Por lo tanto esta prohibido fracasar y no podemos optar entre vencer o morir, necesario es vencer.
La patria nos necesita, y nos llama a luchar por ella.
Patria, socialismo o muerte.
Estamos venciendo.
viernes, septiembre 05, 2008
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