martes, julio 08, 2008

"MARXISMO Y NEOLIBERALISMO SON LOS MISMO"

Francisco Rivero: ¿Filósofo o Profesor de Filosofía?
"Marxismo y neoliberalismo son lo mismo"
Aureliano Márquez
VENEZUELA

Sin dudas que en VTV, canal 8, el de todos los venezolanos, no dan pie con bolas con la programación. El domingo próximo pasado, muy entrada la noche sintonicé un nuevo programa conducido por Francisco Rivero. Una hora, ó 45 minutos, de una aburrida y enredada explicación sobre la crisis moderna del pensamiento o el pensamiento moderno de la crisis, finalmente da igual para la ensalada de conceptos que de manera incoherente allí se planteó. Esto en voz, gestos y una redundante muletilla (¿"Está Bien"?) del señor Francisco Rivero, quien además es presentado por el generador de caracteres como "Filósofo" y afirmó alegremente que Marximos y Neoliberalismo son la misma cosa.

Debemos comenzar por recordar que ni siquiera García Bacca aceptó jamás que lo tacharán de Filósofo, a pesar de contar con una extensa obra y haber elaborado una metodología propia de análisis histórico. La verdad es que más cercano a ser filósofos estuvieron Juan Nuño, Ludovico Silva, Federico Riú , Núñez Tenorio y el propio Capelletti que este profesor Rivero, quien requiere de una hora televisiva par decir por la calle en medio que el neoliberalismo y marxismo son las mismas cosas. ¡Absurda afirmación!

Rivero se salta la verga y se olvida del origen de ambas corrientes filosóficas, la primera, el pensamiento liberal, se levanta sobre las bases del sistema de ideas de Parménides de Elea; y la segunda, incluyendo el materialismo dialéctico, se fundamenta en la obra de Heráclito de Efeso. No obstante, no espero que valgan estas líneas para polemizar sobre las similitudes y diferencias entre neoliberalismo y marxismo, entre Parmenides y Heráclito, sino para alertar a quienes tienen en sus manos la programación del canal 8 a que no se dejen meter gato por liebre con tipos de derecha que buscan un palco para terminar de confundir a la audiencia revolucionaria y que además tienen la osadía de hacerse llamar filósofos.

Y mi llamado de atención es en particular para el ministro Izarra, para que monitoreé los que está haciendo el bachiller Pimentel con la programación de VTV. Alertas camaradas, porque nuestro pueblo está desmovilizado por la gestión de algunos de nuestros gobernadores y alcaldes, y si a eso sumamos filósofos como Rivero en televisión, enredando más los conceptos del socialismo, corremos altos riesgos que pueden trascender hasta de lo ideológico.

Marquez.aureliano@gmail.com


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Aureliano Márquez

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Preocupa ver cómo el esfuerzo invertido durante la semana para sembrar
conciencia, para ir abriendo camino hacia un pensamiento libre y
desalienado, corre el riesgo de ser vuelto sal y agua con la
transmisión los domingos por Venezolana de Televisión del programa
"Sin Contemplaciones" en el que Francisco Rivero (doctor en filosofía
y profesor en la Universidad Metropolitana) se esfuerza con grandes
gestos y abundante saliva en mostrar como el único camino de salvación
del hombre, la aceptación del dios universal (según él, el dios de
Israel, ese en cuyo nombre se ha oprimido y destruido tanto); la
biblia como la fuente de la sabiduría, y toda corriente de pensamiento
que ignore estas dos premisas, como contraria a la esencia del ser
humano. Van tres programas y no hace Rivero sino repetir lo que dijo
el primer día: la religión cristiana no puede pa'pierde con nadie. El
helenismo, el cristianismo definen al hombre, y con ello se queda
fuera una gran parte de la humanidad "infiel" y "no civilizada".

No sé si Francisco Rivero es filósofo en un sentido que vaya un pelín
más allá de tener una credencial o mostrar una plaquita en la
pantalla. Sé que es o ha sido profesor de filosofía en la Universidad
Metropolitana, casa de estudios no precisamente caracterizada por la
contribución al pensamiento filosófico, ni por la preocupación por la
justicia y la libertad que muestran sus educados, pero no me inspira
confianza ese salir ahora a pontificar en transmisión nacional sobre
lo que, salvo que sea un secreto muy bien guardado, no ha sido capaz
de instigar en sus alumnos.

Me recuerda el profesor Rivero a esos vendedores de aceites
milagrosos, de palabra fácil y gestos grandiosos, que envuelven al
público con medias verdades, con falsa empatía y con promesas vacías
para, al final de la sesión, vender la poción mágica, el ungüento
milagroso, el tónico infalible que curará la caspa, reducirá la
celulitis y hará desaparecer ese incómodo lumbago crónico.

Habla el profesor de ser valientes, justos, libres y nos ofrece el
elixir que hará renacer estas cualidades en nosotros. Nos llama a
enfrentar con valentía al poder, a las clases dominantes. A no callar
ante la injusticia y a llevar una vida que sea testimonio de
autenticidad, de integridad, de valor que nadie pueda poner en duda.
¿Cuando se enfrentó Rivero a las clases dominantes? Yo no llamaría
enfrentamiento a ser profesor de materias de relleno en colegios
grandes de señoritos y señoritas, y saltar del barco justamente cuando
lo espera la lancha que lo llevará a la fama de la caja boba.

Ungüento de tortuga Rivero, pague uno y llévese dos. Oferta válida
hasta que se acabe la existencia. Pedidos por el teléfono….

María Cecilia Valecillos

Anónimo dijo...

procura ser mas esplicito en lo que se pide