DIA DE LA DIGNIDAD NACIONAL Y DE LA SOLIDARIDAD

Por Mireya Baltra.
CRÓNICA DIGITAL

Hablar del cobre, del rescate de nuestra principal riqueza, del sueldo de Chile y de nuestra soberanía plena es hablar del Presidente Salvador Allende. El 11 de julio de 1971, en la plaza “los Héroes” de Rancagua, el Presidente declaro esa fecha: “Día de la Dignidad Nacional y de la Solidaridad”.
En medio de la multitud y en presencia de los trabajadores del cobre, en particular los mineros de El Teniente, Allende pronuncio como Estadista uno de sus mas macizos discursos.
En el marco de una naturaleza furibunda ya que días antes violentos temporales y sismos de gran intensidad habían azolado nuestra patria. El Presidente Allende al iniciar su discurso le hablo en primer termino al Padre de la Patria, Bernardo O`Higgins “Aquí se sienten el ayer y el pasado, el heroísmo de los que lucharon y sacrificaron sus vidas para darnos sentido y contenido de pueblo…” “y aquí podemos decirle al Padre de la Patria que somos sus legítimos herederos, y que fue el Pueblo el que ganó esta batalla de la independencia y la dignidad nacional”. Ese día junto al Presidente Allende estaba el Cardenal Raúl Silva Henríquez, quien comprendía el histórico y trascendental momento de ser dueños de nuestro principal recurso El Cobre. La concentración se realizo en Rancagua antes que el Congreso Pleno modificara nuestra Constitución Política y aprobara por una unanimidad la Nacionalización del Cobre.
Recuerdo que el presidente Allende sostuvo que la única manera de que el Cobre y otros metales fueran verdaderamente de Chile y para los chilenos era modificar la Constitución que como el señalo en su discurso… Era la única forma de deshacer la maraña jurídico-económica que nos amarraba con las Empresas Imperialistas.
El gobierno de la Unidad Popular se ajustaba así al estado de derecho interno y ejercía el mandato de la Resolución 1.803 de diciembre de 1962 de las Naciones Unidas, que establece que los países tienen derecho a Nacionalizar sus riquezas esenciales.
Las palabras del presidente Allende cobran hoy una exigencia que no puede ser soslayada y que pone en evidencia y en el centro del debate el incumplimiento del Programa Fundacional de la Concertación. El Programa de la Concertación, planteaba…”La defensa del patrimonio minero nacional, preservar la autonomía y soberanía nacional en el cobre, la regulación del ritmo de la expansión de la producción chilena de cobre y la estabilización del precio del cobre en los mercados externos, agregar valor a las exportaciones de cobre: cobre refinado (100% cobre) y manufacturas de cobre y por ultimo la defensa y el desarrollo dinámico de las empresas nacionalizadas administradas por CODELCO.
Por el contrario, la Concertación se hizo cómplice de la dictadura en un fraude jurídico e inconstitucional, al darle continuidad a una normativa de esta, que en los hechos anulan la Constitución Política del Estado , entregando nuevos yacimientos cupríferos a las trasnacionales bajo lo que se denomina las “Concesiones Plenas” dándole un carácter de apropiación privada.El economista Orlando Caputo para reafirmar lo anterior entrega en un Articulo cifras indesmentibles en el proceso de la desnacionalización de nuestras riquezas básicas, CODELCO antes producía el 95 % y en la actualidad solo produce alrededor de un 30%.
Es abismaste las utilidades obtenidas por las empresas extranjeras solo en el año pasado se llevaron como utilidades netas 20 mil Millones de Dólares. Si realizamos una suma de lo obtenido por el alza del metal rojo en los mercados internacionales que alcanzan la misma cifra, arribaremos a la conclusión de que somos victimas de la más brutal expoliación de nuestros recursos esenciales.
El movimiento huelguístico de los trabadores de la Gran Minería del Cobre, plantea la demanda patriótica de la renacionalizacion del Cobre, esa bandera debe ser levantada por millones de chilenos, si realmente queremos ser un pueblo digno. El presidente allende en la plaza de los Héroes de Rancagua, al finalizar su Discurso, nos dijo…”El Cobre es el Sueldo de Chile, así como la tierra es su pan…”
Por Mireya Baltra. Ex Ministra del Trabajo y Previsión Social del Presidente Salvador Allende. Miembro del Consejo Editorial de Crónica Digital.
Santiago 10 de Julio de 2007
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