sábado, julio 28, 2007

EN LA CALLE Y SIN LLAVIN

En La Calle Y Sin Llavín

Por Lorenzo Gonzalo, subdirector de Radio Miami, 27 de Julio del 2007

Las bolsas de valores de todo el mundo cayeron ayer ante las noticias de dificultades con las carteras de préstamo en Los EU.
La primera gran caída había tenido lugar el Martes, 24 de julio del 2007 cuando Countrywide, una de las grandes compañías hipotecarias había declarado que el mercado de los bienes raíces no se nivelaría hasta el año 2009.
Los bienes raíces en EU, también en Europa y en menor medida en el resto de los países capitalistas son parte del proceso especulativo con que las corporaciones hacen sus grandes capitales y acumulan ganancias sin producir nada. Es el proceso por el cual el dinero pierde su significado y se convierte en más dinero.
No voy a hacer una explicación del dinero. Nunca fue parte de mi especialidad como economista. Incluso me fue ajeno en cuanto a la importancia que se le daba, por encima de las labores profesionales y las producciones mismas. No obstante debo dejar acotado que surgió como instrumento de cambio, sustituyendo objetos de consumo, otrora utilizados para el trueque de mercancía. El dinero más fácil de llevar, trasportar y almacenar, permitió impulsar los procesos de producción individual y más tarde sintetizar numéricamente, las grandes producciones industriales, los servicios y el comercio.
El tiempo lo transformó de valor nominal a un valor en sí, con el surgimiento de las finanzas, la categoría precio como factor de medición y el azar del proceso de producción que hoy conocemos, adquiriendo finalmente el mágico poder de crecer por sí mismo al margen de lo producido.
Por supuesto esta ilusión conlleva ajustes reales que periódicamente tienen que producirse porque en la realidad ese fenómeno de “multiplicación”, exceptuando el pasaje bíblico, no existe en la práctica.
Cuando el ataque del 11 de Setiembre del 2001 las bolsas cedieron al pánico, que es otro de los factores condicionante de este juego de azar sin ruletas. Entonces los capitales en juego se retiraron y el vicio se continuó Esta vez apostando a la compra de inmuebles, principalmente casas. Como resultado de la contracción de la demanda de edificios y nuevas construcciones, los precios subieron, porque la Ley de Oferta y Demanda no es un invento de las personas, sino resultado de la manera en que producimos. A mayor Demanda y menor Oferta, mayores aumentos en los precios. El dinero, en su doble papel de instrumento de cambio y ficha de juego, colocó el “precio” de los inmuebles a niveles que no se correspondían con todo el proceso real de la producción. Pasado el pánico de “las Gemelas”, las apuestas regresaron a la bolsa, arrastrando consigo la irrealidad de un sector de la construcción que nada tenía que ver con las necesidades de viviendas.
Este fenómeno se posibilitó porque para facilitar las operaciones de venta las compañías de préstamos establecieron facilidades otorgando créditos, sin considerar las posibilidades de pago de las personas que los recibían. Al disminuir nuevamente el precio de las propiedades y faltar las personas a sus compromisos de pago, el andamio se fue al piso, no sin antes llevarse la bolsa del “dinero”, los que se dedican a la magia de su “multiplicación”. Quizás un 40% de los nuevos propietarios se queden ahora en la calle y sin llavín y además, sin posibilidades de poder comprar nuevamente.
Lo interesante de todo esto es observar cómo aún, los problemas de EU afectan de manera apuballante, el proceso mundial de la economía.
See what you’re getting into…before you go there. Check it out! =
.AOLWebSuite .AOLPicturesFullSizeLink { height: 1px; width: 1px; overflow: hidden; }

No hay comentarios.: