Golpe de Estado Silencioso en Colombia

Golpe de Estado Silencioso en Colombia
Por: Luis Armando Luna Fecha de publicación: 05/03/0
Publicado por Yndamiro Restano

Ante la inminente reunión de los negociadores franceses con Raúl Reyes, acordada para el sábado 01 de marzo con la anuencia de Uribe, la línea dura del alto mando militar-encabezado por el ministro de Defensa Juan Manuel Santos- advirtió al Presidente Colombiano que asumirían “de facto” la conducción del Gobierno , bajo la figura de un Estado de Necesidad o Excepción. Washington estaba enterado del asunto.En total acuerdo con Uribe, el presidente Sarkozy tenía tres enviados personales en Colombia, desde el mes de octubre de 2007, en una negociación con Raúl Reyes para alcanzar la liberación de la franco-colombiana y ex candidata presidencial Ingrid Betancourt. Los negociadores franceses estaban situados en la zona cercana donde se produjo el ataque. Otro enviado personal de Sarkozy había sostenido una reunión previa con el Comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, a fin de asegurar que el encuentro se diera en los términos acordados.El sábado, los tres negociadores se encontraban a menos de 200 kilómetros de la zona del ataque y se dirigían a la reunión con Reyes cuando recibieron una llamada de última hora por parte de Restrepo. El Comisionado para la Paz les advirtió, sin mayores explicaciones, que no se acercaran al lugar pautado para la negociación.Horas antes en el Palacio de Nariño una situación de tensión se presentó, cuando miembros del alto mando- encabezado por el ministro de Defensa Juan Manuel Santos- advirtieron en tono desafiante y desesperado - según la fuente que reveló esta información- que detuviera la reunión que estaba por celebrarse entre los tres negociadores franceses enviados por Sarkozy y Reyes.Uribe en un intento por persuadir a la cúpula castrense, que la negociación era parte de un acuerdo silencioso con el presidente francés, para lavar la imagen internacional del gobierno ante las críticas por su poca colaboración con la gestión humanitaria para la liberación de rehenes en manos de las FARC, recibió a cambio una dura advertencia que fue motivo de una crisis momentánea en el alto gobierno. Desde Washington, el presidente Colombiano recibió una llamada solicitándole que atendiera “las recomendaciones” de su mando militar y apoyara “incondicionalmente” las operaciones conjuntas entre su ejército y fuerzas especiales (ubicadas en la base de Manta- Ecuador), que se realizarían en las próximas horas sobre territorio Ecuatoriano. Ante la presión ejercida internamente y desde el exterior, Uribe se pone a la orden incondicional de su alto mando, constituyendo lo sucedido en un “Golpe de Estado Silencioso”.Esto explica- según la fuente ubicada en el palacio de Nariño- las declaraciones atropelladas y contradictorias del presidente y sus personeros durante las horas siguientes al ataque sobre el campamento de las FARC, donde se celebraría la negociación para liberar a la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt. Los hechos van develando que en Colombia está gobernando “bajo sombras” la línea dura del alto mando militar, sectores retrógrados de la clase oligárquica, los paracos y el pentágono.
armando.luna@live.com