PUBLICADO POR JOSE MARCELO SANCHEZ
Alexis está lleno de vida, a pesar de lo que le
negó el bloqueo
Jorge Luis Merencio Cautín
GUANTÁNAMO.— Sonriente, con semblante agradable, envuelto en los trajines escolares, lleno de vida y optimismo se encuentra Alexis García Iríbar, el niño de esta ciudad que el pasado 9 de marzo fue operado a corazón abierto de una cardiopatía congénita, con riesgo para su vida, porque el gobierno de Estados Unidos impide vender a Cuba los dispositivos para el cateterismo intervencionista, que sustituye la cirugía.
Alexis junto a sus padres.
Ese avanzado proceder mínimamente invasivo se practica con muy buenos resultados en el Cardiocentro Pediátrico William Soler, para el cierre de defectos de comunicación entre cavidades del corazón y la dilatación de válvulas cardíacas estrechas, entre otras afecciones, que evitan tener que llevar al paciente al salón de operaciones para practicarle una intervención quirúrgica a corazón abierto.
Sin embargo, el gobierno norteamericano prohíbe a las compañías NUMED, AGA y Boston Scientific suministrar a Cuba los dispositivos Amplatzer y Embolization Coil, mediante los cuales se evita la peligrosa intervención, se reducen los riesgos para la vida de los pacientes, el período de ingreso y los gastos hospitalarios.
El caso del infante guantanamero fue denunciado el pasado miércoles en la Asamblea General de la ONU, por el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, como uno de los muchos ejemplos probatorios de los efectos criminales del bloqueo yanki contra el pueblo cubano.
La imposibilidad de disponer de esos medios no dejó otra opción a los especialistas del William Soler que la de practicar la intervención a corazón abierto, pues a medida que avanzaba el tiempo empeoraba el estado de salud de nuestro hijo, cuentan Marga Liuvis Iríbar Matos y Alexis García Quiala, padres del pequeño, quien cumplió siete años el pasado mes de julio.
El día de la intervención quirúrgica y los primeros del post operatorio —rememoran— prácticamente nadie de la familia durmió. Aquí, en nuestra casa en el reparto Caribe, se estableció una especie de puesto de mando para el contacto permanente con nosotros, que estábamos al lado de nuestro hijo, en Ciudad de La Habana.
Aseguran que la operación, realizada por el Doctor en Ciencias Médicas Eugenio Selman-Housein Sosa, director del William Soler, fue exitosa y que la recuperación ha transcurrido sin ningún problema. El niño, antes aquejado de falta de aire, de taquicardia, cansancio y dolor en el pecho, está en buen estado y realiza sus actividades con desenvolvimiento y normalidad, en correspondencia con su etapa recuperativa.
Sus padres agradecen también el desempeño del Centro Provincial de Genética Médica, dónde se detectó el defecto cardíaco, y el del Doctor Juan Orlando Perdomo, quien ha estado al tanto en Guantánamo de la evolución del niño.
Alexis estudia segundo grado en el seminternado Iván Rodríguez, donde goza del afecto de sus compañeros y maestros, quienes también formaron parte del improvisado "puesto de mando" familiar.
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